Lactancia materna durante las primeras semanas

Lactancia materna durante las primeras semanas

Puede que la lactancia sea natural, pero eso no significa que sea fácil. Las primeras semanas de lactancia son un periodo de aprendizaje tanto para ti como para tu bebé. Ambos estáis aprendiendo una nueva habilidad. Tu bebé nace con muchos reflejos sorprendentes que le ayudarán a mamar y, a medida que pases más tiempo con él, aprenderás todas sus señales. Aquí tienes algunos consejos y sugerencias de una asesora de lactancia que pueden facilitarte esos primeros días de aprendizaje.


1. Pide ayuda pronto a un IBCLC si tienes problemas o simplemente para que responda a tus preguntas y compruebe que las cosas van bien. No espere a pedir ayuda si tiene problemas.


2. Vacíe sus pechos con frecuencia. Alimenta a tu bebé a demanda entre 8 y 12 veces al día; si no le das el pecho directamente, utiliza el sacaleches. Los pechos vacíos producen más leche que los pechos llenos. La extracción frecuente de leche durante las primeras semanas es fundamental para la producción de leche a largo plazo.


3. Empieza a aprender las señales de hambre de tu bebé. Fíjate en lo que hace justo antes de tener mucha hambre (agitarse, hocicar, llevarse las manos a la boca) y dale de comer cuando lo haga. Recuerda que el llanto es una señal tardía de hambre.


4. 4. ¡Descansa! Apóyate en tu pareja y en tu sistema de apoyo. Tu principal trabajo es recuperarte del parto y alimentar a tu bebé. Pide ayuda para todas las tareas domésticas. Si tienes hijos mayores, pide a familiares o amigos que te ayuden a cuidarlos en la medida de lo posible.


5. Asegúrate de que recibes la nutrición y los líquidos adecuados. La producción de leche requiere unas 500 calorías adicionales al día. Come muchos cereales integrales, proteínas, gatos sanos y frutas y verduras. Alimentar tu cuerpo es importante para tu propia curación y para los niveles de energía necesarios para cuidar de un nuevo bebé. Lleva siempre contigo una botella de agua y bebe hasta saciar la sed. Necesitas mantenerte hidratada, pero no necesitas agua "extra" para producir leche.


6. Únete a un grupo de apoyo virtual para padres o lactantes. La Liga de la Leche o el hospital de tu localidad pueden tener uno, o hay muchos grupos en Facebook para conectar con otras mamás que dan el pecho o se extraen leche.


7. Contrólate mentalmente o pídele a tu pareja que vigile tu salud mental. Si necesitas ayuda o no te sientes tú misma y parece algo más que la tristeza del embarazo, acude a tu ginecólogo para que te facilite recursos.


8. Sé flexible. No puedes predecir cómo será tu vida cuando llegue el bebé, así que prepárate para hacer cambios o cambiar de marcha si es necesario. Sepa que no siempre es un camino lineal, y no pasa nada.


9. Celebra tus éxitos, aunque parezcan pequeños. Hazte un "brelfie" (selfie de lactancia) en cada hito para crear un pequeño álbum digital al final.


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